¡Pobre amiga mía! Pocas cosas duelen tanto como las uñas despegadas por proyecciones transversales (u otros elementos). Definitivamente elegiste un camino arduo, la parte buena es que sos "re científica". Y bue, pertenecer tiene sus privilegios... pero también sus costos.
5 comentarios:
jajajajaja
buenismoooo
talita, horrible, usted sabe que sufro como si fuese bambú...
¡Pobre amiga mía! Pocas cosas duelen tanto como las uñas despegadas por proyecciones transversales (u otros elementos). Definitivamente elegiste un camino arduo, la parte buena es que sos "re científica". Y bue, pertenecer tiene sus privilegios... pero también sus costos.
Jajajaja, la verdad que no se, muy científica la cosa, pero las uñas duelen, y no quiero ver un pescado ni pintado.
Besos.
Me hipnotiza esa foto.
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