Claro, cierto...


Dicen que no por mucho madrugar se amanece más temprano... Pero últimamente dormir de más no arroja el mejor resultado. Una amiga dice que el aire últimamente no para de oler, yo (en mi humilde opinión, bueno no es humilde) lo que veo es gente haciendo cosas jipis, que no paran de hablar bajo los efectos del faso(ooo) y que además tienen "esperanzas". Al fin y al cabo, yo se que mi sensualidad se desborda de cada uno de mis poros, pero a la primer promesa de amor eterno me agarra pánico en las axilas y quiero irme volando por las tangentes... Soy como el fantasma de la ópera, pero con serias intenciones de conquistar el mundo luego de una desaparición masiva por ataques de zombies goma que bailan reggeaton y tienen una fe ciega en las opiniones de Marcelo Bonelli...





4 comentarios:

Anónimo dijo...

ganas de amar y miedo a ser amado? ó ganas de ser amado y miedo a querer? ó las dos cosas, o las tres ¿cual será la tercera?

Pili (Como Cher...) dijo...

mmm, no diría que es miedo al amor, todo lo contrario... el problema es que últimamente la gente desborda en promesas infladas por sentimientos instántaneos: como la posmodernidad...

Un saludo.

Pazchi dijo...

Su sinceridad me pega muy de cerca, señorita, pero desde el otro lado: una declaración de amor -no posmoderno, claro- espantó(me) a una muchacha que tuve que exorcisar -escribiendo, claro- recientemente; quizás todavía haya en el mundo algunos locos dispuestos a creer en el amor no-posmo, pero son difíciles de encontrar, eso seguro...!

Un gusto =)

Pili (Como Cher...) dijo...

jajajaja a veces pasa, no lo niego, a veces el amor pasa jajajajaja...

Publicar un comentario