Figura Retórica

No pretendo que esto oficie de confesión, de ninguna manera. Te pido disculpas pues la palabra escrita es un camino que transito más fácilmente que la conversación, y si por momentos mis ojos parecen esquivar a los tuyos es que tengo miedo que descubras cuan frágiles son las ideas que sostienen mi cabeza y cuan profunda la convicción de que el todo es más que la suma de las partes y no es nada, yo no soy nada.
Soliloquios interminables, monólogos al infinito, tautologías perfectamente angostas, metáforas absurdas, analogías incomparables, generalizaciones exageradas, amores paradójicos, confusión de niveles, jerarquías al cuadrado, variables descontroladas, el oxímoron que crea tu cintura breve y el algoritmo perfecto para no equivocarse a la hora de preparar café.
Confusión y claridad, conocerte y olvidarte, ternura y dureza, el camino a seguir y un rostro que no deseo olvidar. Rodillas flexionadas y aroma a limón…
Vomitar conejitos blancos entre el primer y el segundo piso de una casa prestada, con paciencia y resignación esconderlos en un placard y alimentarlos, y cuando la situación se hace insoportable, cuando la incapacidad se vuelve costumbre asentada en la base del cuello, concluir, hablar…
No pretendo que esto oficie de confesión, de ninguna manera. Te pido disculpas si el exceso de adjetivos opaca el sentido de mis sentimientos, te pido disculpas si no te hice ver que tu presencia me alegra las horas posteriores y anteriores, te pido disculpas si mi ingenuidad me hace creer que las cosas son fáciles cuando te espero con ansia, te pido disculpas si mi pánico me encierra en estas palabras, y me pido disculpas a mí misma porque mi silencio me evita saber tu verdad.
Pies que caminan con pesadez, mañanas que huelen a sol, soles que recuerdan otros soles, caras que miran asombradas las cenizas de un cigarrillo consumido, voces que hablan de otras cosas, números que bailan, ventanas que buscan el horizonte y horizontes que se dibujan tímidos en una garganta incapaz de gritar, hojas en blanco, mentes llenas de fantasías, noches que esperan amaneceres, ocasos que se niegan a concluir, más de mil miedos ocultos y una agitado exalar.

5 comentarios:

Chanina dijo...

Quisiera que eso fuera para mi.... cuanta verdad en sus palabras, cuanta dulzura y amor? Nunca he tenido la oportunidad de ver este lado suyo... nunca había llegado tan lejos con algo...
Quisiera que eso sea para mi..."no le hice ver que su presencia me alegra las horas posteriores y anteriores" que maravilla!

talita dijo...

guau.
se pasó señora pili, se pasó

Pili (Como Cher...) dijo...

Gracias chicas, me alegro que les haya gustado, pues creo que es una de las cosas más sinceras que escribí en toda en mi vida.
Chanina, usted sabe que en cierto sentido esto es también para usted.
Talita, siempre gracias.
Besos a ambas.

Sol dijo...

Ojalá algún día alguien me escriba algo así a mí. Ojalá que cuando ese día llegue, yo sea capaz de entender y corresponder.
Mi gran amiga, excelente escritora, sensible poeta, sagaz arqueóloga, inteligente y sensible ser humano (¡flor de mina!): espero que sus palabras lleguen a buen puerto

talita dijo...

gracias a ud señora pili. nuevamente

Publicar un comentario